Actualmente, debido a los días en casa, se ha tomado el tiempo para analizar el contenido de @revestidasblog y su aceptación. Recientemente, descubrimos que los mensajes de aliento, ánimo y que declaran bendiciones generan bastante interacción, es posible que la crisis por Coronavirus y su efecto en el mundo haya generado desánimo en la vida de las personas pero tomando en cuenta la fecha del cuál se inició el estudio, ya existía la misma cifra de una posible preocupación entre nuestros seguidores hacia el destino de sus vidas.
Y la pregunta es: ¿Sientes miedo por el fracaso o de no prosperar en la vida?
En el camino de la vida una persona se propones metas, sueña y trabaja en base a éstos pero ¿Qué hay cuando el miedo inunda tus fuerzas? El temor al fracaso es algo cotidiano de enfrentar, lamentablemente como humanos, es probable que las noticias económicas, políticas o simplemente el entorno te desmotive. Pero como cristianos (seres que viven por medio de la fe En Cristo) estamos llamados a caminar en aguas profundas y no mirar abajo.
Aunque parezca loco eso de caminar por las aguas y más que loco es humanamente imposible, sabes que tu Dios es aquel que llama lo que no es como si lo fuera (Romanos 4:17) y no hay nada para él que resulte imposible (Lucas 1:37). Es normal que en momentos te desanimes pero encuentra tus fuerzas en Cristo (Filipenses 4:13)
El verso anterior, ha sido un himno en la vida de muchas personas no importa cuántos títulos académicos tengas, no importa cuán hábil seas, no importa cómo se encuentre el mercado hoy: TODO LO PUEDES EN CRISTO QUE ES TU FUERZA.
Es difícil ver a los demás logrando metas, viajando, adquiriendo cosas que tu corazón desea y es entendible que sientas que temor a que a tu no prosperes, pero tu Padre Celestial está interesado en abrir los cielos para bendecirte, la Biblia dice que ni Salomón con toda su sabiduría y riqueza por ser Rey de Israel se vestía como las aves ¿Sabes quién viste y alimenta a las aves del cielo? El Señor. Lo mejor de todo es que ellas no se preocupan por ninguna de esas cosas. Entonces ¿Para qué preocuparse?
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Y aquí es donde te dejo una variedad de promesas para descansar de la preocupación.
1. No temas
(Isaías 41:10)
este versículo se menciona más de 300 veces en la Biblia, los teólogos aseguran que existe uno para cada día del año ¿Viste eso? Tu Dios se interesa tanto por tí que cada día te recuerda que no le des lugar al temor. Incluso, hace referencia de esto como un mandato no una sujerencia, lo menciona más veces que no robes, no mates... Porque Dios sabe que inviertes demasiado tiempo en preocuparte.
2. Sé diligente
Si trabajas duro, sacarás provecho, pero si no haces más que hablar sólo tendrás miseria. Prov. 14:23
3. Sé justo
Aveces dejarse llevar por las circunstancias hace que seas propenso a caer en negocios ilícitos o malversar fondos, es por ello que tener convicciones cimentadas en Cristo evitará que desesperes. Ten en cuenta lo que dice la Biblia de esto:
El hogar del justo progresará, pero el del perverso será destruido.
(Proverbios 14:11)
4. ¿Oras?
¿Te dedicas a orar?
Orar sin cesar, 1 tesalonisences...
5. Piensa lo bueno
En la ciencia existe algo llamado la ley de atracción, el cual plantea que "los pensamientos se convierten en cosas" Y mientras más pensamientos de preocupación tengas, el cual es tan llenos de cosas negativas, más probabilidades tienes de fracasar porque tu energía es negativa.
En una conferencia que dictó el coach de las misses de Venezuela en el auditorio de la Universidad Arturo Michelena, se refirió al impacto que tiene la negatividad en nuestro organismo así que pidió a un chico del público que hiciera un ejercicio con él, pidió a un estudiante que mantuviera su brazo levantado y que dijera ¡No! Varias veces mientras que haría un esfuerzo por hacer bajar su brazo.
La sorpresa fue que por mucho que el chico ponía su empeño para mantener su brazo arriba el negativismo le impedía sostenerlo, así que el coach bajaba fácilmente su brazo porque su fortaleza era nula. Luego de ello, le pidió que dijera ¡Sí! lo cual, arrojó un resultado completamente distinto, su cuerpo se mantuvo firme y se concentró en mantener el brazo levantado, haciendo que el coach tuviera que hacer un esfuerzo extra para bajarlo.
Por último en esta primera parte del tema:
5. Busca el reino de Dios primero
Si pones al Señor como lo primordial en tu vida todo lo demás tendrá poco valor, verás las situaciones pequeñas ante un Dios gigante y dejarás de vivir conforme al poder de tus fuerzas para depender del poder de tu Creador.
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